lunes, 10 de noviembre de 2008

Agujeros Negros

El nacimiento de los voraces agujeros negros, aquellos cuerpos celestes cuyo intenso campo gravitatorio es capaz de devorar toda estrella que se cruce en su camino, no siempre se produce a partir de las terribles explosiones llamadas supernovas que habitualmente señalan la muerte de una estrella.
El astrofísico argentino Félix Mirabel, investigador principal del Conicet, ha aportado las primeras evidencias observacionales que confirman una teoría reciente, que sostiene que algunas estrellas, las más masivas, se apagan en silencio, abriendo un agujero negro -un hueco en el espacio que da a regiones donde las leyes de la física resultan absurdas-.".
"Por formación en la oscuridad nos referimos a que algunos agujeros negros no surgen a partir de una explosión de supernova",
El estudio en cuestión confirma una teoría postulada hace menos de dos años, que afirma que "si las estrellas son muy masivas, al colapsar no se produce una explosión en supernova, sino una implosión".Nada escapa de ese silencioso colapso, ni siquiera la luz. Así es como un observador atento desde la Tierra al titilar de la estrella que muere, simplemente la verá desaparecer para siempre, como ocultada detrás de un velo oscuro.
Aunque hay otro inconveniente: estos partos suelen ser fugaces. "Pueden ocurrir en segundos, por lo que nos encuentran a los astrónomos desprevenidos -señala Mirabel, investigador del Instituto de Astronomía y Física del Espacio (IAFE)-. Por eso las evidencias como las nuestras suelen provenir de observaciones indirectas."







Biografía de Orsted

Hans Christian Ørsted Rudkobing, Dinamarca, 14 de agosto de 1777Copenhague, Dinamarca 9 de marzo de 1851) fue un físico y un químico danés, influenciado por el pensamiento alemán (de Emmanuel Kant y también de la filosofía de la Naturaleza).
Fue un gran estudioso del
electromagnetismo. En 1813 ya predijo la existencia de los fenómenos electromagnéticos, lo cual no demostró hasta 1819, junto con Ampere, cuando descubrió la desviación de una aguja imantada al ser colocada en dirección perpendicular a un conductor, por el que circula una corriente eléctrica, demostrando así la existencia de un campo magnético en torno a todo conductor atravesado por una corriente eléctrica, e iniciándose de ese modo el estudio del electromagnetismo. Este descubrimiento fue crucial en el desarrollo de la electricidad, ya que puso en evidencia la relación existente entre la electricidad y el magnetismo. Oersted es la unidad de medida de la reluctancia magnética. Se cree que también fue el primero en aislar el aluminio, por electrólisis, en 1825, y en 1844 publicó su Manual de física mecánica.[1]
En 1820 descubrió la relación entre la electricidad y el magnetismo en un experimento que hoy se nos presenta como muy sencillo, y la cual llevó a cabo ante sus alumnos.
Demostró
empíricamente que un hilo conductor de corriente podía mover la aguja imantada de una brújula. Podía, pues, haber interacción entre las fuerzas eléctricas por un lado y las fuerzas magnéticas por otro, lo que en aquella época resultó revolucionario.
Ampère conoció los experimentos de Ørsted en septiembre de 1820, lo que le sirvió para desarrollar poco más tarde la teoría que sería el punto de partida del electromagnetismo. Cuanto más se aceptaban las teorías de Ampère por parte de otros sabios, más se reconocía la autenticidad e intuición de Ørsted, tanto en la comunidad científica como entre sus conciudadanos. Tras este descubrimiento, el sabio danés siguió contando con un prestigio y una fama que nunca menguaría hasta el momento de su muerte.


Experiencia de Oersted
Hans Oersted estaba preparando su clase de física en la Universidad de Copenhague, una tarde del mes de abril, cuando al mover una brújula cerca de un cable que conducía corriente eléctrica notó que la aguja se deflectaba hasta quedar en una posición perpendicular a la dirección del cable.

Más tarde repitió el experimento una gran cantidad de veces, confirmando el fenómeno. Por primera vez se había hallado una conexión entre la electricidad y el magnetismo, en un accidente que puede considerarse como el nacimiento del electromagnetismo. Imagen publicada en http://www.phy6.org/earthmag/oersted.htm

200.000 personas acudieron a su entierro y la población danesa sintió mucho su muerte puesto que gracias a sus descubrimientos y a sus dotes de orador, había contribuido a transmitir una imagen activa y positiva de Dinamarca.